El seleccionador nacional, Luis Enrique Martínez, se mostró muy «feliz» por la victoria (7-0) de su equipo este miércoles ante Costa Rica, al mismo tiempo que reconoció que, a pesar de la euforia del momento, no quiere caer en «elogios», por lo que ya está pensando en el partido contra Alemania del próximo domingo.
«Somos los primeros que mañana empezamos el entrenamiento para preparar el partido de Alemania. El elogio debilita, lo sabemos, y nosotros no vamos a caer en ello. La idea es jugar así siempre, pero no vamos a ganar de goleada siempre. Cualquiera que entienda de fútbol ve que somos un rival complicado», señaló el técnico en declaraciones a TVE, recogidas por Europa Press.
Aún así, el seleccionador no quiso ponerle ni una pega a su equipo, en la que fue la mayor goleada de la historia de la selección en un Mundial. «Estoy muy feliz. Cuando salen las cosas el fútbol se convierte en un deporte maravilloso, tuvimos el control del partido en todo momento que era el objetivo, ante un rival correoso que sabíamos que iba a generar problemas. Pero estuvimos excepcionales en el manejo del balón. Con la misma idea que acompaña a la selección desde hace años. El partido no se acaba hasta que pita el árbitro», indicó.
«El único objetivo en este partido como en los que vienen era dominar el juego, para eso hay que tener el balón. Estructurarnos para que el rival se aburra y encuentre poco sitio para participar. Estuvimos excepcionales en la posesión de balón, en la presión. Es importante que un equipo esté compensado. Los 16 que participaron estuvieron soberbios. Pero aún tenemos margen de mejora», afirmó.
En cuanto a los nombres propios, el asturiano destacó el papel de Rodrigo Hernández como central, novedad en el once ante Costa Rica. «Entendemos que reúne todas las condiciones que pueda tener un central y es un pivote de primer nivel. Jugador completo y versátil. Si le podemos incluir con esas características físicas y técnicas nos viene muy bien. Al final soy afortunado de tener tantos jugadores que puedan participar», destacó.
Luis Enrique tampoco dio pistas sobre si este once será el elegido para el resto de partidos del Mundial. «No soy de repetir, pero no doy pistas. No sé quién va a jugar. Si conseguimos nuestro objetivo que es el de estar siete partidos, lo haremos contando con todos, no con once. Seguramente no repitamos, creo que no he repetido nunca un once», aseguró.
Consciente de la gran plantilla que tiene, y con el partido ya resuelto, el mister dio entrada a cinco jugadores tras el descanso, entre los que destacó el debut de Alejandro Balde. «Se han dado las circunstancias perfectas, tenemos que cuidar a Jordi que ha estado soberbio y ha salido ovacionado, me alegro por él. Como Busi, que es una maravilla. Los jugadores quieren sentirse queridos. Y ha sido el momento para Balde, con media charla porque no hemos podido dar mucha información, pero es un avión y ha aprovechado sus minutos», reconoció.
Por último, el seleccionador también tuvo palabras de reconocimiento hacia Marco Asensio, autor del segundo gol. «Está espectacular. Vosotros sólo veis el principio de los entrenamientos pero está a un nivel pletórico de confianza, hoy estuvo extraordinario en la continuidad de juego y en el remate», concluyó.