El comisionado de la PGA estadounidense, Jay Monahan, descartó en este momento la posibilidad de reconciliación entre los jugadores que han optado por dejar el circuito para competir en las nuevas LIV Golf Invitational Series.
Las dos competiciones están inmersas en polémicas legales, con los jugadores del LIV Golf presentando una demanda antimonopolio contra el PGA Tour después de que fueron suspendidos como miembros tras jugar en el nuevo circuito, que tiene suculentos premios monetarios.
En este sentido, y antes de la disputa de la Copa Presidente entre un equipo de los Estados Unidos sin figuras como Dustin Johnson, Brooks Koepka o Bryson Dechambeau, ante uno de jugadores internacionales, Jay Monahan dejó claro que la perspectiva de una tregua está «fuera de la mesa».
«Creo que he sido bastante claro en esto y no veo que esto pueda suceder si miras dónde estamos y piensas en palabras y acciones. Actualmente estamos en una demanda judicial, por lo que unirnos y tener conversaciones, para mí, está fuera de la mesa, y lo ha sido durante un largo período de tiempo», advirtió el comisionado a ‘Golf Channel’.
El directivo indicó que si se mira al circuito estadounidense el enfoque que tienen es el de «presentar la mejor plataforma competitiva para los mejores jugadores del mundo para lograr al más alto nivel, para ganar los campeonatos que tienen historia, tradición y que crean legado».
«Me han escuchado decir antes que nos vamos a centrar en las cosas que controlamos; tenemos más activos a nuestra disposición, asociaciones más sólidas y tenemos a los mejores jugadores del mundo diciéndonos que no sólo se van a comprometer para jugar más, pero realmente están mirando a la organización para lograr eso. Se trata de dónde estamos y hacia dónde vamos y no podría estar más entusiasmado con las posibilidades aquí», sentenció Monahan.