La Real Sociedad se complicó su acceso a la fase de grupos de la Liga de Campeones Femenina 2022-2023 después de perder este martes en la ida de su ‘playoff’ por 0-1 ante el potente Bayern Múnich alemán, rival que impuso su oficio y experiencia, aunque también pasó apuros, sobre todo en la media hora final.
Un gol al filo del descanso de la Lea Schüller obligará al conjunto ‘txuri-urdin’ buscar la remontada en la capital bávara, algo que no se antoja imposible después de un primer capítulo donde se mostró competitivo y mucho más peligroso con la entrada de Amaiur Sarriegi.
El estreno en la máxima competición continental en el Reale Arena pareció pesar un poco más al equipo de Natalia Arroyo en el inicio de partido. La Real, con Amaiur Sarriegi de nuevo suplente como en el estreno de la Liga F, no pudo encontrar a Nerea Eizagirre y el Bayern comenzó mejor, aunque tampoco creó demasiado peligro sobre la portería de Lete Para más allá de una falta ajustada de Simon y uno centrado de Stanway.
Poco a poco, y en cuanto su capitana entró más en juego, las realistas fueron tomándole el pulso al choque y pudieron lanzar un primer aviso con una combinación entre Gemma Gili y Eizagirre, cuyo pase atrás no encontró rematadora.
El tramo final del primer tiempo fue sobre todo más de las visitantes, que tuvieron muy buenas ocasiones. Dallman, de las mejores, se topó con el palo, y Schüller gozó de dos, no perdonando en la tercera tras un gran pase de Buhl. La Real también dispuso de una buena opción antes del 0-1 tras una buena jugada de Bernabé, pero el disparo de Gaby se fue cerca del palo.
Tras el descanso, la Real Sociedad salió dispuesta a controlar y ser más agresiva, una ambición que le pudo costar la eliminatoria porque, con espacios, el Bayern perdonó. Gwinn, a puerta vacía, no atinó con su remate y poco después Lete Para se erigió en salvadora con una parada a bocajarro a Schüller y luego reflejos felinos para evitar que una rival empujase el balón suelto.
Natalia Arroyo decidió entonces mover su banquillo y dio entrada a Amaiur Sarriegi, la cual dinamizó mucho más el ataque local y provocó que la media hora final fuese más de sufrimiento para el equipo alemán. Nerea Eizagirre vio como su disparo, desviado ligeramente por Grohs, se estrellaba en el larguero, y la capitana volvía a dar un serio aviso minutos después.
Viggosdottir se cruzó rápidamente para evitar el mano a mano de Sarriegi, y Specht hizo lo mismo en una de las internadas finales del Bayern, que también pudo hacer el 0-2 definitivo por medio de Rall. La última del partido, muy clara, fue de la Real, pero Amaiur Sarriegi no acertó con su remate y su equipo tendrá que buscar en Múnich el billete.