Una Real sin brillo gana con trabajo en casa al Omonia y suma su segunda victoria en Liga Europa

La Real Sociedad consiguió sumar tres nuevos puntos en Liga Europa en su primer partido en el Reale Arena, donde sufrió para ganar este viernes por la mínima (2-1) al Omonia Nicosia chipriota, un equipo que sin apenas presentar oposición a los de Imanol Alguacil, le dio un buen susto, que dejó en solo eso Alexander Sorloth.

Un gol en el minuto 80 del delantero noruego, el primero que marca tras su regreso a San Sebastián, sirvió para que el conjunto donostiarra consiguiese una pírrica victoria que parecía controlada en todo momento desde que Guevara abrió el marcador en la primera parte, pero que se complicó con un grave error defensivo en el 72.

El equipo ‘txuri-urdin’ llegaba muy crecido a la cita tras haber ganado al Manchester United en Old Trafford en su debut europeo, aunque la derrota en Getafe del fin de semana y la grave lesión de Sadiq podían sembrar dudas. Imanol Alguacil aprovechó para hacer muchas rotaciones, y solo repitieron Álex Remiro, Mikel Merino y Álex Sola, lo que no impidió que desde el primer momento su favoritismo estuviese patente ante un Omonia que se dedicaba a defender acumulando hombres.

Sin necesidad de estar brillantes o especialmente acertados, los españoles se pusieron por delante con un gol de Ander Guevara a la media hora de partido, que remató a la escuadra un balón suelto en la frontal del área. Lejos de espolear a la Real, el gol aletargó todavía más el partido, para desesperación de Imanol Alguacil, que se desgañitaba en la banda para pedir más ritmo.

Tras el descanso, el técnico guipuzcoano introdujo un triple cambio para intentar revitalizar el equipo, y aunque la imagen fue algo mejor, siguió siendo bastante gris, quizás contagiado por un rival que no llegó a acercarse a la portería en todo el partido, pero que aprovechó su ocasión. En un balón largo aislado, Aritz Elustondo y Álex Remiro se equivocaron y chocaron, regalando el gol a portería vacía a Bruno.

Con 1-1 en el 72, acuciaron las urgencias y fue entonces cuando apareció Kubo. El japonés, muy activo desde que entró al campo, ganó la espalda a la defensa y le sirvió un balón raso que cruzó el área a Sorloth, que se lanzó al suelo para mandarlo al fondo de la red con su pierna izquierda. Con el 2-1, el partido volvió a bajar de ritmo y la Real no sufrió nada hasta el pitido final.

Gracias a este triunfo, la Real Sociedad sigue de pleno y lidera con seis puntos habiendo jugado ya su partido más complicado, su visita al Manchester United. Su próximo rival europeo será el Sheriff Tiraspol moldavo, al que visitará en octubre y que tiene tres puntos que cosechó en la primera jornada.