Diego García Carrera: «La marcha española siempre está a un nivel muy alto»

El atleta español Diego García Carrera recordó este lunes que «la marcha española siempre está a un nivel muy alto» y que tanto él como sus compañeros se sienten «orgullosos» haberlo demostrado una vez más con los éxitos cosechados en el Europeo de Múnich (Alemania), donde obtuvo la medalla de bronce en los 20 kilómetros.

«La marcha española siempre está en un nivel muy alto y en ese sentido pues sí que nos sentimos muy orgullosos de poder demostrarlo. En el Mundial no pudo ser, pero eso también nos enseña que las medallas no las regala nadie, que esto es muy complicado y que a veces se puede, pero en otras el mundo es muy grande, hay muchos países y todos quieren ganar», declaró García Carrera a su llegada a España.

El marchador se mostró «muy contento» porque la medalla es «la prueba y la recompensa» de que ha hecho un buen trabajo. «El deporte es lo que tiene, hay que currar mucho y que entrenar mucho pero no siempre viene el resultado. Entonces cuando tenemos la oportunidad de conseguirlo y de recibirlo hay que saber disfrutar y estar muy contentos», aseguró.

Pasar por meta tercero «fue un momentazo» para el madrileño, que confiesa que tuvo que sufrir «mucho». «Tuve un ataque de flato punzante en la parte alta del abdomen que, durante unos momentos, no sabía si iba a poder mantener el ritmo y si mis rivales me iban a coger. Tuve que hacer ahí un ejercicio de concentración absoluto, confiando en que se iban a ir esas malas sensaciones y que iba a poder en los últimos dos kilómetros retomar el ritmo que tenía antes para defender la medalla», relató.

«Finalmente, cuando pasas la línea de meta y lo consigues dices ‘Por fin, todo el esfuerzo tiene su recompensa’ y es muy gratificante. Encima con el doblete que hicimos los españoles eso sí que es maravilloso», destacó en relación al oro conquistado por Álvaro Martín.

El madrileño había comentado en sus redes que había estado comiendo tanto con Asier Martínez como con Mario García Romo antes de que estos consiguieran sus medallas en la cita y que esperaba tener suerte él también.

«Yo no sé con quién cené yo, pero tengo que reconocer que también comí un día con los del 4×400 y finalmente no pudieron conseguir la medalla, así que al cien por cien no salió. Pero también sospecho que algo tuvo que ver lo que es el entrenamiento de estos atletas que consiguieron la medalla, pero no lo puedo confirmar», bromeó.

Ahora en el horizonte tiene los Juegos Olímpicos de París, donde sueña con tocar metal y va a «entrenar para ello». «Sabemos que nos falta un ‘pasito’ con respecto a los japoneses, que yo no he sido capaz de ganarles todavía, y ahí van a estar seguro. Si queremos ganarles vamos a tener que dar un ‘poquito’ más, pero de eso se trata el deporte, creo que tenemos todavía margen de mejora y vamos a ir a por ello», apuntó.

Ahora va a «descansar» tras «dos últimos días bastante intensos después de competir». «Ahora hay que hacer en siete días lo que no se ha hecho en el verano, estar un poquito con la familia y los amigos. La verdad es que tengo muchos destinos la próxima semana», concluyó.