El tenista alemán Alexander Zverev confesó que el español Carlos Alcaraz «es el mejor jugador del mundo ahora mismo», después de caer (6-3, 6-1) en la final del Mutua Madrid Open, pero lamentó que los horarios le condenaran a trasnochar dos jornadas, un lastre que le hizo estar lejos de su mejor versión.
«Alcaraz está jugando increíble, de eso no hay duda. Está jugando increíble, pero tengo que decir que el trabajo de la ATP fue muy desafortunado esta semana. Hace dos días me fui a la cama a las 4:00 y ayer a las 5:00. Si alguien se va a dormir a esas horas, puede ser incluso difícil despertarse», dijo en rueda de prensa.
El número tres del mundo no quitó mérito a la actuación del español, a sus 19 años, pero insisitó en que los horarios se deben mejorar para poder competir con la exigencia de una final. «Para mí, jugar al día siguiente una final contra Alcaraz, quien para mí es el mejor jugador del mundo ahora mismo, en un Masters 1.000, es difícil. Estoy un poco enfadado», apuntó.
«No tuve coordinación, ni en mi saque ni en mis golpes de fondo de pista. Fallé golpes muy fáciles. Igual estando fresco no hubiera ganado a Alcaraz pero sin duda hubiera hecho un mejor partido. Si te acuestas a las 4, al día siguiente estás muerto, si lo vuelves hacer, levantarse será un momento complicado», añadió.
«Me siento triste por la final que he jugado porque podía haber sido un gran partido. No tuve ninguna opción de ser yo mismo. No tuve ocasión de jugar a mi nivel. No es la primera vez que esto me pase, pasa a menudo y estoy un poco cansado. Nadie quería ver un partido como el que salió, la gente quería una gran batalla, pero no soy un robot. Desde el calentamiento ya vi que iba a ser difícil», terminó.