El gobierno del Reino Unido sigue «abierto» a la venta del Chelsea a pesar de imponer sanciones de congelación a los activos del propietario ruso del club londinense, Roman Abramovich, que ha anunciado recientemente su intención de traspasar la entidad tras el inicio de la guerra en Ucrania.
Reino Unido debería aprobar una nueva licencia para la venta de Chelsea, siempre y cuando el multimillonario ruso Abramovich no obtenga ganancias en el movimiento. Abramovich ha sido dueño del Chelsea desde 2003, pero puso el club a la venta el pasado 2 de marzo a raíz de la invasión rusa en Ucrania.
Abramovich ha sido sancionado por el gobierno británico este jueves en medio de vinculaciones con Vladimir Putin, presidente de Rusia, algo que el propietario del Chelsea siempre ha negado rotundamente.
El portavoz del primer ministro Boris Johnson dijo: «Ahora estamos hablando con el Chelsea y esas conversaciones continuarán. Sería parte de esas discusiones los términos de cualquier licencia específica que se otorgue para permitir que se lleve a cabo cualquier venta».
«Lo importante es que, bajo ninguna circunstancia, cualquier venta permitiría a Roman Abramovich beneficiarse de eso o ganar dinero de esa venta. Es justo decir que el Gobierno está abierto a la venta del club, pero actualmente requeriría otra licencia y eso requeriría más conversaciones con el Tesoro y otros departamentos», añadió.
El Chelsea no podrá realizar transferencias y tampoco podrá negociar nuevos contratos con los jugadores actuales, una situación que afecta a los defensas César Azpilicueta, Antonio Ruediger y Andreas Christensen, que finalizan sus contratos a finales de la presente temporada.
Además, el club ha perdido este jueves el patrocinio de la empresa de redes de telefonía móvil ‘Three’ después de que el propietario ruso Roman Abramovich fuera sancionado por el gobierno del Reino Unido tras la invasión de Ucrania.
«A la luz de las sanciones recientemente anunciadas por el gobierno, hemos solicitado al Chelsea Football Club que suspenda temporalmente nuestro patrocinio del club, incluida la eliminación de nuestra marca de las camisetas y alrededor del estadio hasta nuevo aviso», dijo un portavoz de la empresa.
«Reconocemos que esta decisión afectará a los muchos aficionados del Chelsea que siguen a su equipo con pasión. Sin embargo, creemos que, dadas las circunstancias y la sanción gubernamental vigente, es lo correcto (…) Como red móvil, la mejor manera en que podemos apoyar a la gente de Ucrania es garantizar que los refugiados que llegan al Reino Unido desde el conflicto y los clientes que se encuentran actualmente en Ucrania puedan permanecer conectados con las personas que les importan».
