Javi Lliso: «Me siento un poco Bart Simpson»

El esquiador Javier Lliso afirmó este miércoles sentirse «un poco Bart Simpson» tras lograr, con una sexta plaza, el diploma olímpico en esquí acrobático en los Juegos de Pekín y que confiaba mucho en el ‘Plan B’ para clasificarse entre los mejores después de un primer salto frustrado.

En una rueda de prensa telemática junto al presidente del Comité Olímpico Español (COE), Alejandro Blanco, y su entrenador, Josep Gil, en la Villa Olímpica de Zhangjiakou, el madrileño, debutante con 24 años en unos Juegos, confesó lo impactante que resultó dibujar trucos en el aire con la chimenea de una fábrica metalúrgica al fondo.

«Las instalaciones son muy curiosas. No pensé que haríamos un ‘Big Air’ en una antigua fábrica metalúrgica. Es bastante loco. Alguien saltando con una chimenea enorme dentrás. Me siento un poco Bart Simpson», comparó Javier Lliso, con la sonrisa del sueño cumplido grapada tras el diploma.

Lliso desveló cuál fue la táctica que aplicaron en la final olímpica. «Después del primer salto, al no salir bien, sabía que tenía el ‘plan b’, con el que estaba muy seguro. En los ensayos no me había caído ninguna vez, y fui a por ello con la misma calma», explicó.

Con 3 años fue a la estación de Sierra Nevada con sus padres y se calzó, por vez primera, unos esquís. Un año después viajó a Cerler y de sus hermanos heredó su afición por el estilo libre en el esquí hasta llegar a este instante cumbre.

«Esto se entrena desde hace mucho tiempo. Empieza con la cama elástica y entendiendo cómo funciona tu cuerpo en el aire. El llegar hasta aquí, a unos Juegos, era un sueño. Sabía que había cumplido un objetivo en mi vida. Después pensé en disfrutar cada segundo. Es brutal, estoy muy contento», manifestó.

Amante de la música rock, Lliso toca la guitarra y se refugió en la letra del grupo madrileño Turgot para evadirse en los momentos previos a la final. «Hace unos cuantos años le cogí una guitarra a mi hermano y de ahí mi afición. Hoy sé lo que estaba escuchando. A unos amigos de Madrid Turgot, que me dan muy buen rollo y es una música muy diferente», desveló.

GIL: «HEMOS TRAIDO ESTE DEPORTE A LA LUNA»

Por su parte, su entrenador, Josep Gil, destacó que su pupilo «ha controlado la tensión» tras el primer intento fallido. «Esto viene de hace 7 años, cuando mi objetivo era crear un equipo. Al principio nos juntamos con Andorra, conocí a Javi Lliso y el primer año sus padres hicieron esfuerzo enorme para que estuviera aquí. Vinieron los ‘top 5’ en Europa, la Copa del Mundo … Nos ha ido muy bien. Hemos traído este deporte desde la base hasta la Luna», destacó.

La estrategia, esgrimió Gil, era intentar subir al podio con el primer truco. «El segundo lo ha bordado y el tercero, también. Teníamos mucha confianza porque estaba esquiando muy sólido, y lo ha conseguido. Los trucos los hace el ‘rider’. Yo soy un ‘friki’ de esto, sigo a todos y sé lo que hacen todos los riders del mundo. Mi trabajo es crear la estrategia y qué truco necesitan para conseguir una posición», resumió.

El presidente del COE, Alejandro Blanco, subrayó que Lliso es un «deportista con mucha ambición» y al que le «brillaban los ojos». «Este deporte tiene presente y un gran futuro después de ver este gran resultado. La competición ha sido perfecta. No salió bien el primer salto, pero los otros dos han sido maravillosos. Con este entrenador estoy convencido de que se van a conseguir superar todos los límites. Gracias por el trabajo presente y futuro y seguro que marcarás una etapa en los deportes de invierno», apuntó a Gil.

El técnico tendrá que cumplir una apuesta: se teñirá el pelo de amarillo y vestirá un traje rojo para representar los colores de la bandera. «Fue una apuesta que hicimos cuando llegamos a la Villa. Si alguno acababa en posición de diploma le tocaba teñirse el pelo», dijo jocoso Javi Lliso, histórico ya en el libro de los deportes de nieve en España.