La nadadora española Mireia Belmonte confesó este lunes que el 2021, con al disputa de los Juegos de Tokio, fue un año «bastante duro» por las lesiones, por lo que el cuerpo le pidió «un parón» para «descansar», antes de una temporada con el Campeonato de Europa que se celebrará en verano en Roma como la gran prueba de 2022.
«El hombro siempre está ahí con un poco de dolor. Son muchos años nadando, muchos kilómetros encima, pero creo que, con una buena preparación y una buena prevención de lesiones, todo puede ir mejor. Este periodo de descanso me ha servido de desconexión mental y física que era la que más necesitaba. El año pasado fue bastante duro en cuanto lesiones y el cuerpo me estaba pidiendo un poco de parón y de descansar», señaló Belmonte en declaraciones a los medios de comunicación facilitadas por la UCAM tras realizar dos exámenes en la universidad.
Pero la catalana ya piensa en los próximos Juegos de París 2024 como la «meta a largo plazo», con un ciclo olímpico que será solo de tres años. «Ahora mismo no tengo objetivos definidos, ya que empecé a nadar hace unos pocos días y voy mirando el día a día, con las sensaciones que tengo y escuchando al cuerpo. Tenemos el Campeonato de España Universitario del 29 al 30 de abril. Es la competición que estaría más cerca, pero ahora me centro en los entrenamientos», afirmó.
«El Campeonato de Europa es una meta que está marcada, pero todo dependerá de si nado bien el Open de España y después el Mare Nostrum en junio, así que agosto está lejos y no pienso en ello todavía», admitió.
Mireia Belmonte acudió este lunes a realizar dos exámenes en la Universidad Católica de Murcia del Grado en Publicidad y Relaciones Públicas. «Uno de Lenguaje Publicitario y otro de Narrativa Audiovisual. Siempre es complicado compaginarlo con los entrenamientos, pero si te esfuerzas un poquito, al final las cosas salen», concluyó la deportista.
