El ciclista suizo Stefan Bissegger (EF Education-Nippo) ha ganado la cuarta etapa del Tour de Suiza, disputada entre Sankt Urban y Gstaad sobre 171 kilómetros, imponiéndose bajo la lluvia a sus compañeros de la fuga siendo agresivo mientras que el neerlandés Mathieu van der Poel (Alpecin-Fenix) sigue líder.
En una etapa de transición, todavía más por las inclemencias climáticas con cierto frío y lluvía constante en la parte final, Bissegger rompión con la neutralidad suiza y fue incisivo en sus intentos de triunfo, hasta lograrlo en el esprint final.
Bissegger, que fue segundo en la contrarreloj inicial y ocupó el ‘trono’ de líder virtual hasta que su compatriota Stefan Küng le superó para ser el primer líder de la general, llegó a ser líder virtual en esta cuarta etapa cuando la fuga, de cuatro integrantes inicialmente, llegó a tener más de 6 minutos sobre el pelotón.
Para hacerse con el triunfo, Bissegger se situó en la aproximación a meta dentro del ‘sandwich’, entre Joey Rosskopf (Rally Cycling) y Benjamin Thomas (Groupama-FDJ) –ya dejado atrás el suizo Joel Suter, del combinado helvético–, y atacó a Rosskopf, aguantó a un Thomas que parecía superarle y, al final, entró con fuerza, dominando, en la mojada línea de meta de Gstaad.
Tan sólo 38 segundos le dejaron fuera del liderato. El gran grupo, con el líder Mathieu van der Poel en él junto a otros velocistas como Michael Matthews (BikeExchange) o Julian Alaphilippe (Deceuninck-Quick Step) pese al puerto de 2ª de Saanenmöser a 10 kilómetros de meta, entró finalmente a 5:16 de Bissegger, que sube 70 puestos en la general, hasta el décimo puesto.
Sin más cambios en esa general, este jueves las cosas cambiarán con la llegada de la primera de las etapas de montaña, la quinta, entre Gstaad y Leukerbad sobre 175,2 kilómetros. Para empezar, el puerto de Col du Pillon (1ª, de 6,9 kilómetros al 5,3 por ciento) y, al final, dos subidas encadenadas al ascenso final hasta meta en Leukerbad.
