Carmelo Anthony entra en el top 10 de anotadores de la NBA

Carmelo Anthony, sigue anotando canastas en la NBA. Eso es lo que siempre ha hecho sin parar: con movimientos de vieja escuela, suspensiones de media distancia que están casi en peligro de extinción en una Liga que mira ya casi exclusivamente a la eficiencia matemática: o triples o bandejas. Melo es old school: aclarado, cuerpeo, jab step, latigazo: canasta. Una detrás de otras hasta meterse, ya, entre los diez que más han anotado en la historia de la NBA. En la derrota de sus Blazers en Atlanta (123-114), Melo sumó 14 puntos y llevó su total a 27.318. Elvin Hayes sale del top 10 y entra él, que ahora tiene a tiro a Moses Malone, noveno con 27.409 puntos).

Hay que poner en perspectiva la carrera de Carmelo, un alero extraordinario que ha sido cuestionado porque jamás jugó unas Finales (solo de Conferencia) y, en los últimos años, porque el baloncesto evolucionó hacia un estilo que no era el suyo. Un jugador que tras sus años de gloria en Denver Nuggets (28,9 puntos de media en la temporada 2006-07) y New York Knicks (28,7 en la 2012-13) podría estar ahora mismo fuera de la NBA.

Es así de duro: no le salieron bien las cosas en los Thunder y desde entonces (temporada 2017-18) fue traspasado para ahorrar a los Hawks, cortado, fichado por el mínimo por los Rockets, apartado tras diez partidos, traspasado a los Bulls como peso muerto y cortado otra vez. Eso fue el 1 de febrero de 2019. Ahí pareció cerrarse la puerta de su carrera, sin equipo durante meses, entrenando en solitario y entre rumores de contratos ganga y cuestiones sobre cómo de eficiente podría ser en un aspirante. No tuvo equipo otra vez hasta el 19 de noviembre de 2019, cuando las lesiones arrasaron a los Blazers y estos apostaron por él, sin nada que perder. Desde entonces lleva 122 partidos en Oregón, más de la mitad como suplente (algo antes inimaginable) y ha metido otros 1.767 puntos. Promedia en los Blazers 13,6 (este mes cumple 37 años) y en estas dos temporadas ha pasado a nueve jugadores para entrar en el top 10 histórico de puntos: Kevin Garnett, Tim Duncan, Paul Pierce, Dominique Wilkins, Hakeem Olajuwon… y ahora Hayes. Carmelo, el hombre de las cuatro medallas olímpicas, es una leyenda.

Más allá del hito, muy especial, de Carmelo, fue una mala noche para unos Blazers agotados, de gira y que venían de ganar en Boston y tener que encerrarse en su hotel de Atlanta por aviso de tornado. Después de superar los 30 puntos en tres cuartos (102-95 al final del tercero) se quedaron en 19 (21-19) en el último, sin gasolina. Damian Lillard sumó 33 puntos con 8 asistencias, CJ McCollum metió 20 puntos y Norm Powell 15. Pero ganaron los Hawks, con otro gran partido colectivo al estilo McMillan y control de la situación de Trae Young (21 puntos, 6 rebotes, 11 asistencias) con catarata de puntos europeos: en la primera parte Bogdan Bogdanovic (23 de sus 25, 7/14 total en triples), después del descanso Danilo Gallinari (21 de sus 28, 7/10 en triples). Otra notable victoria para unos Hawks mucho más competitivos desde el cambio de entrenador.

Los dos equipos están en una situación similar y con balances casi idénticos: 36-30 los Hawks y 36-29 los Blazers. Los de Georgia son quintos del Este, a un partido y medio de los Knicks y en una pelea por escapar del play in con Heat (medio de ventaja) y Celtics (uno y medio por delante ahora). En el Oeste, los Blazers son séptimo, en play in pero con solo una derrota más que Lakers y Mavericks en una lucha milimétrica que resolverá los puestos quinto, sexto y séptimo.