Continúa la tendencia de las últimas semanas en la Liga de División de Honor, que ha comenzado a establecer una distancia palpable entre los equipos que tras la jornada 6 ocupan los puestos de la mitad superior de la clasificación y los de la inferior.
Aún quedan cinco fechas de la primera fase del campeonato, por lo que este margen no es ni mucho menos definitivo. Sí lo es el hecho de que el VRAC Quesos Entrepinares, al vencer en un gran duelo al UBU-Bajo Cero Aparejadores, cerrará el 2020 en primera posición y llegará a la Copa Ibérica del domingo 27 con pleno en lo que va de campaña.
Otros equipos que acaban el año con victoria son el Lexus Alcobendas Rugby, el AMPO Ordizia o el SilverStorm El Salvador, que no fallaron en sendas salidas difíciles. No obstante, junto al líder, los grandes triunfadores del fin de semana son el Barça Rugbi, que saldó su desplazamiento más largo en la competición con cinco merecidos puntos y la clasificación para la Copa del Rey por cuarto año consecutivo, y el CR Complutense Cisneros, tras vencer a un rival directo en la lucha por la permanencia.
Las recientes derrotas del Complutense Cisneros fueron mucho castigo dado el nivel mostrado ante varios favoritos, y aunque contra el Independiente (36-15) tuvieron tramos de repetidas indisciplinas y falta de claridad, lo compensaron con un final de primera parte espectacular y algunas acciones individuales de mucha clase en la segunda. Comenzar dominando el partido no sirvió a los bisontes para salir del último puesto. Sumaron el primer ensayo tras una gran jugada abierta con finalización muy habilidosa del ala Finlay Sharp, pero les faltó contundencia en defensa, como en el ensayo de Ike Irusta tras saque rápido de un golpe de castigo.
Los derbis vascos son garantía de emoción y alta intensidad, ingredientes que el Getxo RT y el AMPO Ordizia ofrecieron casi desde el pitido inicial hasta el último tramo, cuando el desgaste físico se notó y los visitantes optaron por rearmarse y no dejar huecos en su campo, a fin de asegurar la victoria (29-46). Buena imagen mostrada por el cuadro vizcaíno, que sin ser consuelo, pues continúa muy cerca del descenso, planteó dificultades a los ordiciarras hasta en situaciones en las que estos suelen sentirse cómodos. Los visitantes encontraron un plan B cuando la defensa rival mejor estaba, como se vio en ensayos como el del centro Engelbrecht.
Poco tendrá que objetar Tiki Inchausti respecto a la primera parte completada por los suyos frente a la UE Santboiana, donde el Lexus Alcobendas Rugby gestionó de manera brillante casi todos los escenarios del juego. El conjunto catalán reaccionó de la mejor forma posible tras el descanso, dejando algunas de las mejores acciones vistas el sábado, pero los granates frenaron el envite cuando peor pintaba el panorama, cerrando la victoria (14-31) con un imponente ensayo del talonador Damián España.
Las palabras no son quizás lo más apropiado para transmitir toda la tensión y pundonor que se vivió en cada ruck, cada pase y cada placaje del choque que habría el domingo y que enfrentaba al VRAC Quesos Entrepinares y al UBU-Bajo Cero Aparejadores. Si bien ambos conjuntos tienen muy encarrilada su presencia en el grupo superior para la segunda fase del campeonato, este era un encuentro clave para que vallisoletanos y burgaleses se autoexigiesen al máximo y reforzasen aún más la confianza del grupo, pues llegaban quizás como los dos equipos más en forma y no quieren que eso cambie.
Hizo falta uno de esos ensayos al ‘estilo VRAC’, de combinación de pases perfectamente trenzados y con impecable definición de Axel Papa, para que los locales comenzasen a encarrilar un choque muy entretenido y que habla muy bien de las posibilidades de ambos esta temporada. Los queseros vuelven con este triunfo (16-6) a lo más alto tras la victoria del Alcobendas el sábado y los de Juan González, a pesar de haberles faltado determinación en los últimos metros, siguen creciendo.
La Copa del Rey ya suma un nuevo clasificado para las semifinales de este año, el Barça Rugbi, quien se impuso por 11-28 al Ciencias Universidad Pablo de Olavide, aunque no fue fácil, pues el primer tercio del encuentro fue realmente igualado y a los de Sergio Guerrero les costó imponer su juego. La enorme compenetración en ataque por parte de los tres cuartos visitantes, bien dirigidos por el joven Otger Sirvent, fue uno de los factores que más castigó al cuadro científico, al que le faltó precisión y quizás algo de confianza para que sus prometedoras incursiones en campo rival fructificasen.
El CP Les Abelles hizo emplearse a fondo al SilverStorm El Salvador en varios tramos de su choque, pero los chamizos, con un excelso Christian Rust a la cabeza, leyeron muy bien el partido en los momentos adversos y alternaron con gran acierto sus distintos registros ofensivos. La victoria visitante (22-42) fue justa y merecida, en parte como decimos por saber elegir muy bien cómo atacar en situaciones muy distintas, aunque los valencianos pueden sacar conclusiones positivas en relación a imagen mostrada/capacidades del rival, quien ya se está acercando a su nivel óptimo.