El piloto español Fernando Alonso aseguró que no tiene «ningún reto» de cara al 2021, que supondrá su vuelta a la Fórmula 1 con Alpine, pero sí tiene claro que debe ser un año para «preparar bien» el 2022, donde todo se puede igualar con el cambio de reglamentación y se pueda «soñar con ganar y estar arriba otra vez».
«No tengo ningún reto en cuanto a posiciones o resultados, pero estaría bien subir al podio como este año en el que ha habido oportunidades para todos. Pero también soy consciente de que todos esos podios de los equipos de la tabla media llegaron por catástrofes de Mercedes y no por prestaciones puras. Tenemos que trabajar y mejorar, sin un objetivo marcado fijo, aunque saborear el champán en el podio sería fantástico», expresó Alonso en ‘El Larguero’ de la cadena SER.
El asturiano recordó que en 2021 los coches «serán muy parecidos» a los de esta temporada y que será «una continuación del dominio de Mercedes». «Quizá en 2022 se mezclen un poco las cartas. Ahora hay una lista grande para esas esperanzas para 2022 y a ver quién las puede cumplir. El 2021 debe ser de preparación e integración para el 2022 y luego soñar con ganar y estar arriba otra vez», subrayó.
En este sentido, con Carlos Sainz en Ferrari, confesó que es «imaginable» que ambos puedan compartir un podio en un Gran Premio. «Pero necesitaremos esas carreras ‘locas’. Con 23 Grandes Premios creo que va a haber cinco, seis o siete en las que alguien va a poder ‘pescar’. Sería un sueño», recalcó.
El bicampeón del mundo señaló que Renault, que pasará a llamarse Alpine, ha tenido unos resultados en 2020, con tres podios, «mejor de lo esperado». «Yo tenía confianza en el equipo y cuando firmé no había empezado la temporada. Han sido resultados bastante positivos y con una línea ascendente. Seis o siete meses atrás había una esperanza, pero no tanto una realidad y ha venido muy bien para la moral llevar esta inercia a la temporada que viene y sobre todo al 2022 con el cambio de reglamentación», advirtió.
Alonso indicó que «nunca» ha dejado de sentirse piloto de Fórmula 1 «estos años» en la que ha corrido «en otras categorías», y también celebró que dentro de «un deporte un poco egoísta», sí haya notado «una bienvenido espectacular y mucho respeto por parte de todo el mundo».
«Creo que la gente ha sabido valorar los retos a los que nos enfrentábamos. La gente del motor saben de la dificultad de los éxitos que hemos logrado y en esta vuelta a lo mejor ha habido un respeto extra», agregó el ovetense, que se subirá al coche este martes en un test de Abu Dabi que ve como «un extra» porque ya lleva «más de 2.000 kilómetros» con el monoplaza.
Finalmente, el campeón del Mundial de Resistencia no ocultó que Ferrari «ha sido un poco la sorpresa» por haber estado «tan atrás» este año. «Será uno de los equipos que más mejore porque cuando tocas fondo es más fácil reconstruir, pero es difícil que pueda estar al nivel de Red Bull o Mercedes», sentenció.