Atlético de Madrid 1-0 FC Barcelona: Carrasco castiga a Ter Stegen

El Atlético venció por la mínima al Barcelona en un partido igualado en el que un fallo de Ter Stegen desequilibró la balanza en beneficio de los rojiblancos. Los de Koeman estuvieron carentes de ideas y no pudieron con el orden rojiblanco. Por su parte los colchoneros se sitúan colíderes y a 9 puntos de los azulgranas.

Hoy era una noche de esas que están marcadas en rojo en el calendario. Tanto por aficionados como por entrenadores y jugadores. Pues es en encuentros como este donde se espera que aparezcan aquellos que están llamados a liderar a los equipos. El Atleti llegaba con bajas sensibles, especialmente la de Luis Suárez, pero iba a contar con Joao Félix. El portugués venía en estado de gracia y hoy todos los focos iban a estar sobre él. Estaba llamado a dar un golpe encima de la mesa. En el otro lado, las miradas se centrarían en Leo Messi, inmerso en una nueva polémica sobre su futuro. El argentino además cumplía 800 partidos como profesional.

El choque comenzó con dos oportunidades claras en ambas áreas. Un remate peligroso de Griezmann en el primer palo y un tiro desde la frontal de Saúl que exigió a Ter Stegen. Los de Simeone salieron bien al terreno de juego, poco a poco se iban asentando y conseguían combinar con criterio en zonas de peligro. En una posesión larga, propia del Barça de Guardiola, los colchoneros movieron la pelota de lado a lado hasta que llegó un balón filtrado a Llorente que disparó, pero el larguero negó el gol a su remate.

El duelo entró en una fase abrupta. Los de Koeman tenían problemas para tocar en el centro del campo. La presión de ambos conjuntos era intensa pero atrasada. Ninguno de los dos estaba siendo capaz de encontrar la fórmula para someter al otro. El partido estaba atascado, y la sensación era que los pequeños detalles decantarían la balanza. Messi tuvo la mejor de la primera parte, pero anduvo dubitativo y Oblak repelió sin excesivos problemas su tiro.

Parecía que esa sería la última, y, prácticamente, única acción reseñable de los últimos minutos, pero en este tipo de tónicas, los aciertos o fallos puntuales decantan el devenir de los acontecimientos. Y en este caso un error de Stegen, forzado por la fe en la presión de Carrasco desequilibraba el encuentro. El belga llegó antes que el meta a un balón dividido y a placer adelantaba a los suyos. Los locales sonreían y los culés llegaban a túnel de vestuarios tras un jarro de agua fría.

Carrasco supera a Ter Stegen en la acción previa al gol

Los rojiblancos salieron con la inercia del impulso anímico del gol tras el descanso. Subieron la línea de presión y Joao Félix  empezaba a estar cada vez más en contacto con el esférico. El Barça estaba mermado, todavía con la digestión del tanto madrileño. Y encima Gerard Piqué se tuvo que marchar lesionado.

No encontraba ni solución ni remedio Ronald Koeman, el Atlético estaba perfectamente posicionado, basculando bien la defensa y amenazando a la contra. Griezmann estaba ausente, Messi apenas participaba y el que más argumentos ofrecía era Dembelé. Los visitantes no conseguían derribar el muro de los locales y recurrían a los disparos lejanos.

En los últimos minutos el cuadro blaugrana espabiló, con más pundonor que ideas, intentaba encontrar caminos para inquietar a Oblak. Griezmann disfrutó de una buena ocasión de cabeza tras un centro de Messi. Koeman dio entrada a Trincao, que se unía a Coutinho y a Braithwaite en la empresa de mejorar el ataque y aportar en el apartado ofensivo. Los catalanes monopolizaban la posesión, pero era plana y la opción más buscada era el tiro lejano, mediante el cual Sergi Roberto estuvo a punto de sorprender al portero esloveno tras golpear en un defensa.

Los rojiblancos se echaron atrás y se dedicaron a defender el resultado, con un Diego Costa que oxigenaba a su equipo cada vez que protegía el cuero. Poco más sucedió y al final los tres puntos se quedaron en el Wanda y Simeone lograba vencer por primera vez en liga al Barça.