Poco antes de que Collin Morikawa, Matthew Wolff y Viktor Hovland asaltaran el PGA TOUR, Sam Burns fue la gran esperanza que salió del golf universitario.
Hace tres años, fue el ganador del Premio Jack Nicklaus como el mejor jugador del golf universitario. Ese mismo año, Burns terminó en el top 10 de un evento de PGA TOUR jugando como aficionado. Luego, en uno de sus primeros torneos del TOUR después de convertirse en profesional, Burns jugó junto a Tiger Woods, y le ganó.
Ahora Burns, que tiene sólo 24 años, tiene la oportunidad de ganar su primera torneo en el PGA TOUR el domingo en el Vivint Houston Open. Comenzará la ronda final en Memorial Park con una ventaja de un solo golpe.
Sin embargo, el vigente campeón de FedExCup, el ex No. 1 del mundo y un exigente campo de golf se interponen entre él y el torneo.
Burns hizo 68 golpes (-2) en la tercera jornada. Está con -9, con un golpe de ventaja sobre Carlos Ortiz y Jason Day, que ayer hicieron 67 golpes.
Sepp Straka está a dos golpes, mientras que Dustin Johnson está tres por detrás. Johnson, que está jugando por primera vez desde el Abierto de Estados Unidos, ha conseguido dos vueltas consecutivas de 66 golpes(-4), después de un mal inicio en la primera ronda, con 72 golpes (+2).
Sin embargo, Johnson y Day, que suman 35 victorias del PGA TOUR, no serán el único problema del que Burns tiene que preocuparse. Memorial Park, el campo municipal que vuelve al PGA TOUR después de un paréntesis que duró más de medio siglo, ha demostrado ser una prueba dura. Su promedio de puntuación esta semana está en un golpe por encima de par. Ha habido 32 triple-bogeys o peor esta semana, más de lo que hubo toda la semana en Winged Foot en el Abierto de Estados Unidos de este año.
El domingo, Burns jugará en el último partido junto a Jason Day y Carlos Ortiz, quien también está buscando su primera victoria en el PGA TOUR.
Johnson, por su parte, podría lograr algo que nunca ha hecho antes. Tiene 23 victorias en el PGA TOUR, pero ninguna de ellos ha llegado después de jugar el primer día. Johnson, que está jugando su primer torneo desde que dio positivo para COVID-19, empezó esta semana con un +2. Sin embargo, rápidamente ha encontrado su forma y ha asegurado que su juego ahora es similar a los Playoffs de la Fedex Cup, cuando terminó 1º-2º-1º para ganar su primer FedExCup.
