Cádiz y Villarreal empatan en un partido atascado y tibio en el que apenas hubo ocasiones de gol. Los visitantes tuvieron el dominio del balón pero fueron incapaces de superar el entramado defensivo de los andaluces.
El partido comenzaba con el Villarreal adueñándose de la posesión y con los locales replegados. A los cuatro minutos ya tuvo el cuadro castellonense el primer acercamiento peligroso con una llegada de Pedraza. Pero en la siguiente jugada, tras un saque de esquina de los de Emery, el Cádiz salió a la contra y se encontró con una falta peligrosa. Alex Fernández la colgaba al corazón del área, Asenjo salía de puños, pero era su defensa la que dejaba el balón muerto, Alvaro Negredo recogía el rechace y de primeras con la zurda la mandaba al fondo de la red. El VAR lo revisó por posible fuera de juego del Choco Lozano y finalmente De Burgos Bengoetxea lo terminaba anulando.
El Villarreal seguía teniendo mayor claridad con el balón y continuaba generando peligro. En una nueva incorporación de Pedraza, se pidió penalti sobre Kubo, pero ni siquiera se revisó. El cuadro gaditano concedió la pelota al submarino, pero se sentía cómodo y salía con mayor verticalidad a la contra que los visitantes. A penas sucedían cosas a partir de la línea de tres cuartos. El duelo estaba enquistado, la velocidad en la circulación era baja y ninguno de los dos equipos eran capaces de trenzar jugadas. Los de Cervera, que hoy cumplía 200 encuentros como entrenador del cuadro andaluz, embotellaron a los valencianos y presentaron una gran solidez defensiva. Se llegaba al descanso con 0-0 y sin prácticamente nada reseñable.
Mismo guion
La segunda parte comenzaba igual que la primera, con Pedraza ganando la espalda y poniendo un centro peligroso que desvió Ledesma. El Villarreal entraba con una marcha más y daba mayor ritmo a los pases. Coquelin y Manu Trigueros avisaban con dos disparos desde fuera del área. El Cádiz estaba menos cómodo. El choque se abría y cada vez había más aproximaciones interesantes. Emery daba entrada e Chukwueze que sustituía a Kubo, titular por primera vez en liga. El japonés no tuvo su mejor día. Por su parte Cervera introducía a Jairo y a Malbasic. El submarino amarillo monopolizaba el esférico y cada vez iba metiendo más atrás a los gaditanos. El técnico vasco metía más pólvora y Bacca se incorporaba en busca del gol.
Seguían sin encontrar la fórmula para percutir y combinar entre líneas los de Castellón. Alcacer probó con un lanzamiento lejano de libre directo y más tarde Bacca remató flojo un balón caído en el área pequeña. El preparador guipuzcoano hacía a la desesperada un triple cambio. Foyth, Rubén Peña y Yeremi se unían al duelo. Bacca tuvo el gol en sus botas tras driblar al guardameta local, pero se lió. Eso sí, el gol no hubiera subido al marcador, el colombiano estaba en posición adelantada.
Los cambios no surtieron efecto y la tónica siguió siendo la misma. Al final reparto de puntos y el Cádiz acumula un nuevo partido sin encajar. El Villarreal desperdicia la oportunidad de colocarse líder provisional.
