Siguen los problemas en Asia y en el deporte como consecuencia del coronavirus. Esta vez, el turno ha sido para la maratón de Tokio, que ha tenido que cancelar más de 37.000 inscripciones de corredores aficionados por temor a la propagación del brote de coronavirus y solo podrá contar con corredores de élite y en silla de ruedas, según ha informado la agencia de noticias nipona Kiodo
Las fuentes han explicado que del total de 38.000 corredores ya apuntados, los organizadores han decidido rechazar la participación en el maratón de todos los que están en la categoría de «participantes generales» ante el temor a que se propague el brote de coronavirus originado en China.
La maratón de Tokio sirve como prueba de clasificación, individual y por equipos nacionales, para los Juegos Olímpicos de 2020 que acogerá este verano la capital japonesa. El maratón sí que contará con la participación de los corredores de élite y los atletas en silla de ruedas, con un total de 206 participantes en las dos categorías.
Los organizadores de la cita olímpica han mostrado su preocupación por la rápida propagación del coronavirus y por la posibilidad de que pueda llegar a tener consecuencias en el evento deportivo, que se desarrollará del 24 de julio al 9 de agosto y que ya se ha especulado que podría acabar con la cancelación de los Juegos Olímpicos.
La organización del maratón de Tokio pidió a los corredores de China que no participaran en la prueba, con la promesa de permitirles participar el año siguiente, pero vista la rápida propagación de la enfermedad, han decidido cancelar la prueba para los aficionados.
