Pese a que se enfrentaban a un rival de menor categoría, el Rayo Vallecano, el Real Betis no se fio ni un pelo y se plantó con todo en el estadio madrileño. Sin embargo, sus jugadores se vieron superados por un conjunto vallecano que se dejó la piel desde el primer segundo con el objetivo de hacer vibrar a su hinchada y entrar en el bombo de los octavos de final.
Los de Paco Jémez saltaron al verde con mucha intensidad y presión alta, lo que convirtieron en ocasiones de peligro. La primera llegó de las botas de Advíncula, que bajó el cuero y buscó portería, pero la jugada quedó nada. Poco después, de nuevo los de la franja roja estuvieron cerca de abrir el marcador, pero Ullóa no llegó a rematar y Luna lo hizo, pero el esférico se perdió por la línea de cal.
Vallecas rugía. El Rayo se gustaba. Y así se produjo una nueva ocasión que muy cerca estuvo de convertir en gol Montiel, asistido por Luna, pero la fortuna no estaba de parte de los madrileños.
El electrónico no se movió hasta el 47’, cuando Vallecas enloqueció gracias al testarazo de Catena. Tras recibir un centro de Joni, el central envió el cuero al fondo de la red.
No se quedó de brazos cruzados el conjunto verdiblanco, que enseguida buscó de nuevo la igualada mediante Marc Bartra, pero su disparo salió desviado. Seguidamente, el guardameta Morro se hizo gigante ante Fekir, al que le ganó en un mano a mano.
Pasaban los minutos en el Estadio de Vallecas y, lejos de echar el freno, los de Paco Jémez continuaron presionando al Betis como al inicio del encuentro. Los de Rubi metieron la quinta, ya que se veían fuera de la Copa del Rey. Y tras insistir y toparse una y otra vez con la férrea defensa del Rayo y un enorme Miguel Ángel Morro, cuando tan solo restaban seis minutos para el final del encuentro, los béticos obtuvieron su premio. Joaquín logró batir al joven guardameta para igualar de nuevo el choque.
Lejos de pensar en la prórroga, Catena buscó de nuevo la meta de Dani Martín con un remate de cabeza que se perdió lamiendo el poste. También querían evitar los 30 minutos más de juego los sevillanos, que armaron la contra. Loren disparó a puerta pero el esférico se estrelló en la madera. Irremediablemente, el partido debía alargarse media hora más.
Fue pasados los primeros siete minutos de la misma cuando Loren, esta vez sí, acertó. El futbolista verdiblanco anotó un gran gol para completar la remontada de la plantilla dirigida por Rubi. Pero los de Jémez no bajaron los brazos y continuaron demostrando que querían estar en la próxima ronda de la Copa del Rey. Tan solo quedaban dos minutos para la finalización del encuentro cuando apareció Andrés para batir a Dani Martín y forzar la tanda de penaltis. La locura volvió a las gradas de Vallecas, que veía cómo su equipo rozaba los octavos de final de Copa.
En la lotería de los penaltis, la suerte sonrió a los de casa. A los que abrieron el marcador en el minuto 47 y a los que se aferraron al torneo del KO en el 118’. Desde los once metros, los de Jémez no fallaron. Mario Suárez, Pozo, Saúl y Catena anotaron su penalti. Sin embargo, Joaquín falló el primero para los béticos y Tello hizo lo propio en el cuarto disparo de los sevillanos.
De esta forma, el Rayo Vallecano se convirtió en uno de los cuatro equipos de Segunda División (junto a Real Zaragoza, Tenerife y Mirandés) que se metió en octavos de final de Copa del Rey eliminando a un conjunto de Primera.
